lunes, 19 de diciembre de 2011

+Por mucho que lo niegues la gente te juzga sin conocerte.
-Eso es mentira, yo nunca he hecho eso.
+¿A no? Veamos, ¿qué opinas del chico que está sentado, apollado en aquella moto?
-Mmmm... tiene pinta de macarra, de chico malo. Se cree mejor porque bebe cerveza, se cree invencible. Creo que es un tío solitario, porque se cree que no necesita a nadie, seguro que es el típico tio prepotente que cree que las puede tener a todas y por eso no se conforma con ninguna.
+Pues te equivocas, en realidad es tímido y por la chica que le gusta sería capaz de robar las rosas rojas de un jardín entero para llevárselas un domingo de madrugada. Es más frágil que el cristal y bebe para intentar ahogar una docena de recuerdos demasiado bonitos para él. Se cree invencible porque sobrevivió a que le rompieran el corazón. No es que no se conforme con ninguna, es que una vez eligió a una chica y la hizo especial para él, la dió más importancia que a su vida y ella le abandonó a su suerte, sin razón alguna. Por eso ahora no se conforma ni con la tía más perfecta. Y ahora dime, ¿qué piensas de mí?
-Creo que eres una chica simpática, tienes pinta de no haber roto un plato en toda tu vida, pareces más frágil que una diminuta gota de agua. Eres tímida, quizás demasiado callada. Tienes pinta de ser la típica niña buena.
+Pues siento decirte que te vuelves a equivocar, yo fui la tía que le rompió el corazón a ese chico solitario.

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